
Si bien nuestra productividad depende de aprender a concentrarnos y dominar las técnicas que ahorran tiempo, a veces son las pequeñas cosas, que a menudo se pasan por alto, las que aumentan nuestra eficiencia. Me refiero a la temperatura ambiente, los suministros de oficina y ese café Starbucks todas las mañanas antes del trabajo.
Así como los toques sutiles pueden ayudarnos a ser más productivos, también pueden perjudicar nuestra productividad. La investigación del Center for Wellness Design muestra que las paredes blancas de las oficinas pueden afectar nuestro enfoque porque se asemejan a un entorno “clínico” y exudan un ambiente “grotesco”. Entonces, si últimamente no ha podido hacer su trabajo en su oficina totalmente blanca, bueno, probablemente pueda culpar a esas paredes insípidas.
Afortunadamente, Taskworld completó un estudio que reveló colores que han demostrado mejorar nuestra eficiencia. Consulte la siguiente infografía para descubrir los mejores colores para su trabajo. Y, si no es posible un cambio de color de oficina a gran escala, al menos puede maximizar su productividad redecorando el espacio de su escritorio.
Infografía cortesía de Taskworld. Foto de ladrillos de colores cortesía de Shutterstock.
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