Esta estrategia curó mi fobia ocupacional (y la tuya también)

La mayoría de nosotros hemos experimentado FOMO profesional (o miedo a perderlo) en algún momento.

Para algunos de nosotros, ese sentimiento se basa en la realidad: existen trabajos que nos hacen más felices, nos pagan más y funcionan mejor para nosotros. Pero para muchos, pensar en “qué pasaría si” afecta seriamente las circunstancias en las que nos encontramos: generamos dudas sobre nosotros mismos, a pesar de que nuestro trabajo actual es realmente una buena opción.

Hace unos seis años, estaba muy satisfecho con mi trabajo de consultoría. Me gusta la gente con la que trabajo y me va bien en la empresa. Sin embargo, todavía hay una pregunta persistente en mi mente sobre si quiero participar a largo plazo. No había mucho trabajo antes de esto, había muchas incógnitas, era difícil saberlo.

Así que decidí explorar un poco y averiguar qué otras cosas preferiría hacer (si las hubiera).
Primero busqué en el directorio de ex alumnos de mi alma mater. Busqué por ubicación, industria, antecedentes similares a los míos y, de forma lenta pero segura, encontré personas con trabajos que suenan geniales. Luego hice lo mismo en mi red personal en LinkedIn. Me puse en contacto con todos en la lista individualmente con un mensaje breve, pidiéndoles que apartaran 20 minutos de su tiempo. Le expliqué que estaba pensando en cambiar de carrera y me preguntaba si su campo era adecuado para mí.

Más de dos tercios de las personas me respondieron (pista: la clave es enviar un correo electrónico corto y pedirles muy poco tiempo), y terminé hablando con una docena de personas con trabajos muy diferentes en dos semanas, incluyendo Brand Manager de PepsiCo, Senior Leader de las Naciones Unidas y Special Projects Manager de la ciudad de Nueva York.

Para cada llamada, realizo una investigación, preparo una lista de preguntas específicas y tomo notas extensas. Rápidamente aprendí que una vez que haces un trabajo que suena sexy, tiende a ser menos sexy. Por ejemplo, eliminé la gestión de marca de mi lista después de escuchar lo difícil que era pasar de un tono de rojo a otro tono de rojo muy similar. Me encanta poder hacer las cosas rápidamente y sé que este entorno puede volverme loco.

Gradualmente, aprendí más sobre el trabajo diario en muchas empresas e industrias diferentes, y llegué a la rotunda conclusión de que prefiero mi trabajo actual a todos los trabajos de los que he oído hablar.

Sí, tomó un tiempo, pero la entrevista informativa aligeró mi carga, ni siquiera me di cuenta de que existía. Sin mi FOMO, soy libre de concentrarme en las grandes cosas en las que estoy trabajando actualmente y disfrutarlo. (¡Hasta que, por supuesto, la vida me tomó por sorpresa y mi carrera dio un giro empresarial!)

Si usted también tiene una situación de FOMO ocupacional, consulte mi próximo libro Las nuevas reglas del trabajo. Encontrará muchos consejos y trucos, desde cómo identificar una lista de objetivos de la industria para explorar, hasta cómo aprovechar al máximo sus propias entrevistas informativas, y musa formas de emocionarse por reducir las opciones de carrera aparentemente ilimitadas en conjuntos más pequeños.

Foto cortesía de Plume Creative/Getty Images.

Este artículo es de índole informativo, es una recopilación de información de internet, esta información no necesariamente esta actualizada o es una fuente final de información. .